Carolyn Hayes se vestirá con el verde de Irlanda en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 ya que aseguró la clasificación con una serie de resultados entre los que destacamos una segunda medalla de plata de Copa Mundo en mayo, cuando secundó a la suiza Nicola Spirig en una final electrizante contra una de las grandes figuras de nuestro deporte.

En la última edición de los Podcast del Triatlón Mundial, Hayes os habla de su carrera médica pendiente, las mujeres que la inspiraron, los entrenadores que la instruyeron y su madre que prenderá una vela por ella en ésta, su primera participación olímpica. Puedes acceder al episodio completo en Apple, Google, Spotify y otras plataformas de relevancia.

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“Siempre quise ser médica, participar en un Juego Olímpico era un sueño muy lejano. Comencé a hacer triatlón en mi segundo año en la carrera de medicina, porque pensaba que era un buen modo de escapar a la presión del estudio. Quizás no fua la decisión más sabia,” admite Hayes, que se abocó a entrenar las tres disciplinas desde el vamos.

“Dejé todo en mi casa en County Limerick para unirme al grupo de entrenamiento Hup Hup donde había 11 niños, gente de 50, 60 años, y eso me encantó. Había camaradería. Y creo que especialmente en el comienzo, dependes en gran medida de la motivación del grupo”

“Es un grupo que alcanza logros importantes, pienso que quería encontrar mi camino y aprender de la gente a mi alrededor. Así que comencé y decidí probarme en un par de eventos. Realmente me encanta la competencia del Triatlón Mundial, sabes, su intensidad. Y luego dejé mi trabajo, me mudé a Wicklow sabiendo que la única manera de progresar era si me dedicaba al entrenamiento y confiaba en mis entrenadores,

Y la movida rindió frutos inmediatamente. La plata en la Copa Mundo Nur-Sultan 2019– su cuarta participación en el circuito de Copas Mundo – demostró que Hayes estaba bien encaminada. Luego siguió una colocación entre las diez mejores en Karlovy Vary, luego de participar en el evento de prueba para Tokio.

“El evento de prueba en Tokio fue muy valioso, pude probar algunas estrategias y comprobar cuáles funcionaban. Me gusta competir cuando hace calor, me encanta. Y los irlandeses somos muy pálidos, pequeños, no me tendría que gustar el calor. Creo que el sol no penetra mi piel, simplemente la toca y se va. El circuito de ciclismo es muy técnico, me sentí cómoda con mis técnicas en esta disciplina, solo debes ser consciente de tu posición, turnarte con atletas que tienen contextura más grande y que por lo tanto, tienen más fuerza.”

¿Quién se sintió más orgulloso cuando se enteró que Carolyn había clasificado para su primer Juego Olímpico?

“Mi entrenador no es muy demostrativo, pero mi madre se sintió muy, muy orgullosa. La familia acompaña tu camino, ciertamente lo hace. Es que al principio entrenas y compites para ti mismo, pero llega un punto en que lo comienzas a hacer por quienes te apoyaron y ayudaron. Creo que es lo que me motiva en los días difíciles.”

Revive el momento en que Carolyn Hayes gana la plata en Lisboa por TriathlonLive.tv y accede al podcast completo a continuación.

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